La madera reciclada da como resultado diferentes desechos, siendo las astillas de madera o serrines uno de ellos, que permiten la fabricación de nuevos materiales o valorización energética, contribuyendo de manera notable a reducir el efecto invernadero. Las astillas pueden utilizarse directamente como combustible, o como subproducto para la elaboración del pellet. Estos usos se alejan de la imagen habitual que todos conocemos de este residuo, atravesando un delicado proceso. Se ha de tener en cuenta el tipo de sierra a emplear, el triturado de la madera en sí y la pureza de la materia prima.
Una astilla demasiado pequeña puede alterar el sistema de combustión de la estufa o caldera, mientras que una astilla demasiado grande bloquearía el sistema de alimentación. La producción de astillas de madera requiere de cierto mimo para lograr un resultado óptimo. Una astilla de calidad, además de valorar la procedencia de la materia prima, suele tener unas dimensiones entre 3-10 cm de longitud, 2 cm de grosor y entre 2-6 cm de ancho.
Veamos de forma más detenida cuál es el proceso de gestión de residuos de madera para lograr la astilla y sus diferentes usos.
¿Cómo se genera la astilla de madera?
Las astillas proceden directamente de residuos de la madera que previamente han sido gestionados, ya sean por ejemplo restos de otras industrias como la del tablero, muebles o palets, entre otros. Estos objetos que no han podido contar con una segunda vida útil se colocan en máquinas trituradoras que cortan la madera en trozos muy pequeños, dando lugar a un combustible de biomasa que pueda ser utilizado tanto por el usuario de a pie para calentar su hogar como por las empresas.
Es importante distinguir entre dos tipos de astillas, Clase 1 y Clase 2, ambas enfocadas a su uso como combustibles de biomasa. Las astillas de primera clase cuentan con un nivel de humedad inferior al 30%, y su uso está destinado a edificios públicos, piscinas, hospitales, etc.
Esta es la astilla más utilizada puesto que su rendimiento es superior a la astilla de Clase 2. . Por otra parte, las astillas de segunda clase ofrecen unos niveles de humedad algo mayores, en torno al 45%, y su utilización está pensada especialmente para empresas con una caldera grande de elevada potencia, que tengan unas necesidades de consumo importantes.
Usos principales de las astillas
Las astillas de madera tienen diferentes usos, aunque el más conocido es la valorización energética, bien utilizándose como único combustible o en un mix de materias primas. .
Por otro lado, algunos fabricantes de pellets parten de subproductos como astilla o serrín en lugar de puntal para transformarlos y obtener el producto final, que son los cilindros de madera prensada que todos conocemos como pellet.
Los pellets se han convertido en uno de los biocombustibles más utilizados gracias a su alto poder calorífico y nulas emisiones de CO2 en comparación a otros combustibles fósiles. Además, la utilización de los pellets no está sólo destinada a calentar el hogar, sino que puede emplearse para cocinar o suministrar agua caliente. Si estás interesado en adquirir astilla virgen, astilla reciclada o pellet a granel, puedes encontrar más información aquí.